¿Cómo empezar tu aventura con el calzado minimalista?

¿Es necesario prepararse especialmente para los zapatos barefoot?

Seguramente esta pregunta te habrá venido a la mente al leer el título de este artículo. Vamos a ponerlo de esta manera: si siempre conduces un coche con transmisión manual, cambiar a uno automático requerirá al menos unas cuantas vueltas para acostumbrarte a la disposición del control. Lo mismo ocurre con los pies. Si desde niño has usado zapatos que amortiguan el talón, aprietan los dedos y obligan al movimiento talón-dedo, o peor aún, te enseñan a caminar desde el talón.

Como puedes ver, volver a los orígenes no será necesariamente fácil, por eso hemos preparado algunos puntos a los que deberías prestar atención para devolverles a tus pies toda su vitalidad y funcionalidad. Como siempre, si tienes alguna lesión, problema de salud o deformidades, te recomendamos acudir a un especialista.

Comienza despacio, deja que tus pies se acostumbren

Es natural que al leer sobre los problemas que resuelven los zapatos barefoot, queramos empezar de inmediato. Dado que otros están experimentando resultados maravillosos, ¿por qué no tenerlos de inmediato? Sin embargo, es importante tratar esto como un entrenamiento y comenzar con un "peso ligero" antes de aumentar la intensidad. Para nosotros, el peso será nada más que el tiempo. Comienza a usar los zapatos barefoot durante períodos cortos del día. Ya sea que salgas a comprar o camines por la casa con tus zapatos nuevos. Algunas personas se acostumbrarán rápidamente, mientras que a otras les tomará unos días más adaptarse. Lo más importante es escuchar a tu cuerpo (¡especialmente si tienes alguna deformidad o problemas de salud en los pies!).

Elige los zapatos barefoot después de una investigación adecuada

El hecho de que los zapatos sean minimalistas no significa que sean adecuados para ti. Es importante ser consciente de que, a medida que la ideología barefoot crece en popularidad, también aumentará el número de fabricantes, incluidos los de mercado masivo. Cuando se trata de zapatos que deben ser saludables para tus pies, y no dañarlos aún más, no vale la pena ahorrar.

¿Cómo deben ser tus primeros zapatos barefoot?

Completamente planos (zero-drop) – permiten mantener una postura correcta
Transpirables y muy ligeros – ni siquiera sentirás que los llevas puestos
Increíblemente flexibles – tus pies finalmente pueden moverse de forma natural
Amplios en los dedos – los zapatos no aprietan ni deforman los dedos
Suela fina y resistente al desgaste – máxima retroalimentación sensorial y acupresión adicional
Hechos con materiales de la más alta calidad – zapatos que durarán mucho tiempo
Zapatos completamente funcionales – deshazte del peso de un calzado incómodo y rígido

Todas estas características se encuentran, por supuesto, en los zapatos barefoot de Magical Shoes. Los zapatos están hechos a mano para asegurar TODAS estas características.

Dale tiempo a todo tu cuerpo para adaptarse

No solo tus pies necesitan tiempo para acostumbrarse a las nuevas sensaciones, sino también todo tu cuerpo. Después de todo, los pies soportan todo el cuerpo, y un talón mal alineado se puede sentir incluso... en tu cráneo.

Tu columna vertebral, rodillas, caderas, todo eso necesita acostumbrarse a la nueva distribución del balance y el diferente alineamiento del pie. Por eso, como mencionamos en el primer punto, es importante tratarlo como un entrenamiento e introducir los zapatos barefoot gradualmente. Con el tiempo, incluso podrás notar cambios físicos, como una mayor separación de los dedos de los pies.

Presta atención a los cambios, especialmente a la salud

Durante tus primeras experiencias con zapatos barefoot, es importante prestar mucha atención a los cambios que ocurren en tu cuerpo. Observa cómo pones los pies en el suelo con los zapatos normales frente a los zapatos barefoot minimalistas. Presta atención a cosas como el balance, las sensaciones en los pies, los dedos y la distribución de los puntos de apoyo en el pie.

Este punto es especialmente importante si padeces alguna de estas condiciones:

Juanetes (hallux)
Dedos en martillo
Pronación y supinación excesiva del pie
Inflamación de tendones o músculos
Dolor crónico en los pies

¡Escucha a tu cuerpo!

No intentes correr de forma natural sin preparación

Correr de forma natural es el "siguiente nivel" de caminar descalzo o con zapatos minimalistas. Se basa en entrenamientos de carrera utilizando zapatos tipo barefoot. Este tipo de carrera supone un reto aún mayor para el cuerpo, especialmente para los pies, por lo que no recomendamos intentarlo sin la preparación adecuada. Debe introducirse de forma gradual, observando cómo responde tu cuerpo. Al principio puede ser difícil, y se debe comenzar caminando, luego con carreras muy cortas, hasta llegar a la transición completa a los zapatos barefoot. Lo más importante es centrarse en el movimiento correcto del pie y correr desde la parte media del pie, para que el talón no sufra impactos contra el suelo y el peso del cuerpo se distribuya de manera uniforme.

Usa separadores de dedos

Los separadores de dedos son bloques simples de silicona que permiten estirar, fortalecer y relajar los dedos, por ejemplo, después de un largo día en zapatos de trabajo. Usar estos separadores durante una hora al día ofrece beneficios tangibles, tanto en salud (prevención de deformidades en los pies) como en rehabilitación después de cirugías. ¡También pueden servir como alivio después de caminar mucho!

Empieza a caminar más descalzo

Caminar descalzo, al igual que nuestros ancestros, ofrece beneficios medibles que no solo fortalecen los pies, sino que también los acostumbran más rápido a los zapatos barefoot. Algunos de los beneficios que han sido confirmados por estudios incluyen:

Caminar descalzo fortalece los músculos de los pies.
Caminar descalzo fortalece el cuerpo. Si sales al césped frío en otoño o, para los más avanzados, a la nieve en invierno, no será una sensación agradable, pero los estudios han confirmado que este hábito fortalece la inmunidad.
Caminar descalzo mejora la circulación en los pies, y experimentar diferentes superficies con los pies descalzos estimula el sistema nervioso.
Caminar descalzo ayuda a los niños a desarrollar pies más fuertes, lo que se traduce en los años posteriores, así como en otras partes del cuerpo como las piernas, las caderas e incluso la postura.
Caminar descalzo es un masaje natural para los pies. La estimulación de las plantas de los pies con factores externos puede ser simplemente... placentera.

Si deseas ampliar tu conocimiento sobre zapatos barefoot, te invitamos a visitar el blog de Magical Shoes, donde encontrarás muchos más materiales educativos.